El futuro del PP de Palma
es el bi-imputado por presunta corrupción JM Rodríguez. Así lo ha querido Bauzá (por incomparecencia),
el alcalde Isern (por resignación) y la mayoría de militantes del PP de Palma a
quienes el bi-imputado por presunta corrupción ha prometido toda clase de prebendas y favores. Si
quiere, Rodríguez podrá ser el próximo candidato a alcalde. De hecho, sería lo
lógico.
Y, francamente, lo apoyo
porque representa sin máscaras ni hipocresías la esencia del PP no solo de
Palma, sino de toda España. Lo más parecido al PP en humano (¿?) es el
bi-imputado por presunta corrupción Rodríguez. La cosmética y el botox con que se embadurnaron Bauzá e
Isern para ganar las elecciones se ha esfumado y van por ahí con el rímel
corrido y enseñando las vergüenzas. El único patanegra que es lo que aparenta es
el bi-imputado por presunta corrupción.
El PP ya ha mostrado la
línea a seguir en su renovación política y su modelo de gestión: el perfil
Rodríguez. Así, con dos testículos en la cabeza. Como los de Delgado.
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