“Tendríamos que haber cerrado el Teatre Principal como Spanair,
de un día para otro”. No habla ningún miembro de la “kale borroka” sino un
cargo - ¿o habría que decir carga? – del PP con visible perfil de respetable ama
de casa de pueblo, Margalida Moner. Hay que agradecerle su franqueza: el modelo del PP es el de
Spanair: cerrojazo sin previo aviso, cuatro mil trabajadores a la calle, 22.000
personas tiradas en tierra y decenas de millones de euros públicos tirados en el
camino. Y a lo Aznar, sin temblarles la mano.
También podrían cerrar de un día para otro el Hospital de
Manacor. La dimisión del jefe de urgencias se lo ha puesto fácil. “Hemos pasado
de la excelencia reconocida con premios, a la desestructuración de la auténtica
válvula de seguridad del sistema sanitario” ha venido a decir este honesto
profesional que no quiere verse implicado en el hundimiento de la sanidad
pública que pretende el PP.
Puede que también les interese cerrar de un día para otro
los juzgados. Así se sabría menos sobre el origen del mayor despilfarro de
dinero público de todos los tiempos practicado en Baleares.
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