Los ricos van ganando

Mientras nos sacamos los ojos entre nosotros,
los ricos se cachondean. Hay que cambiar de
estrategia y dar donde duele.

De momento, y ya con un año de antigüedad, la frase del multimillonario Warren Buffet va en cabeza de lo mejorcito que se ha dicho sobre la crisis: “Claro que existe la lucha de clases, pero la mía va ganando”. Podemos culpar a los políticos en su conjunto, a los líderes europeos, a Merkel, a Rajoy, incluso a ZP si se es muy sádico... La realidad es que el ojo del huracán está en la batalla emprendida hace 30 años por una clase económica dominante para aniquilar el Estado del Bienestar creado tras la II Guerra Mundial. Los ricos quieren ser más ricos, a costa del bienestar de las clases medias y bajas. La crisis, creada por ellos mismos, es su gran excusa.

Recomiendo un repaso a la política de Hollande con su 75% de impuesto sobre ingresos de más de un millón de euros anuales porque ilustra perfectamente el relato. Basta con decir que los ricos más solidarios, aquellos que ofrecían a Sarkozy pagar más impuestos, acaban de decir por lo bajo que “han visto colmadas sus expectativas más allá de lo previsto”. ¡Genial! Al otro lado, patronos de la vieja escuela como Bernard Arnault (Louis Vuitton, Moët, Hennesy... en fin, todo el lujo) se exilian a Bruselas para dar la espalda a un Gobierno socialista. Nada nuevo, ya lo hizo con Mitterrand: se largó a EE.UU. con una maleta cargada de francos.

Hasta que la gente no tome consciencia de que se trata de un pulso de ricos contra los demás, se emplearán energías vanas en culpas, reproches y acusaciones que deteriorarán a todos menos a los ricos.