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| El PP será incapaz de meter en cintura a los tiburones económicos |
Si España quisiera alcanzar a Suecia en empleo público
debería crear unos 3 millones plazas en la Administración pública. Si eso
ocurriera, el paro caería automáticamente en un 60% . Además tendríamos unos
servicios públicos sólidos y de calidad.
¿Estaría así resuelta la crisis? No, porque para sufragar
este aumento habría que aumentar los ingresos del Estado en más de 15 puntos.
¿Es eso posible? La respuesta es sí. Para ello los
poderosos deberían contribuir con más justicia a las arcas del Estado a través
de dos iniciativas:
1. Una
reforma fiscal contundente para que la presión no caiga solo sobre las rentas
del trabajo sino sobre las del capital y los beneficios de las grandes corporaciones.
2. Una apuesta
decidida en la lucha por el fraude fiscal. En evasión de capitales y de
impuestos, España va en cabeza.
El diagnóstico es fácil pero la terapia compleja. Y
mientras gobierne el PP, imposible: tocarán a todos (jubilados, dependientes, empleados, funcionarios, autónomos, parados, estudiantes, científicos, servicios sanitarios, etc) pero no se atreverán con los poderosos, de quienes son fieles servidores.
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