Consejo de amigo: tengan a mano las máscaras anti-gas; se acerca una
avalancha de números de humo. En esa segunda parte de la legislatura seremos
arrollados desde el Gobierno por un tsunami estadístico; balanza de pagos, reducción del déficit,
renta disponible, exportaciones, índice de desempleo... cuyos porcentajes nos
demostrarán lo mucho que ha mejorado nuestra vida en los dos últimos años.
Por supuesto, usted mirará a su bolsillo, a la situación laboral de su
familia y conocidos, a sus ingresos por trabajo, a las pensiones de sus
mayores... y todo permanecerá igual de escuálido. Pero los números de humo serán
formidables.
En Alemania, la gran locomotora económica y modelo a seguir, hay más de
seis millones de personas, seis, que viven de subsidios sociales. El más común
es el denominado Hartz IV, una ayuda acordada para quienes no logran encontrar
empleo. Todos salen ganando, también el Gobierno: los beneficiarios de esas ayudas no
aparecen en las listas del paro. Con lo mismo, en España el paro sería
prácticamente cero.
Insisto, protéjanse contra las estadísticas y los números de humo. Caerán
en cascada.
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