La justicia deja de ser el último asidero ciudadano contra los abusos

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Un gran triunfo de Báñez, la ministra de Trabajo que tiene 47 años y
jamás ha trabajado en una ocupación ajena al PP. Foto:EFE

1. Me lo temía: los más graves desbarajustes del PP tendrán el aval del Tribunal Constitucional, que para eso lo preside un militante del PP. El más alto nivel jurídico español acaba de dar el visto bueno a tres artículos de la Reforma Laboral que habían sido recurridos. Quedan otros recursos por dirimir, pero el TC ya nos ha enseñado su pata negra y peluda por debajo de la puerta. Imagino que en las bancadas de los populares reinará la euforia y se habrá oído de nuevo lo de “Que se jodan”.

2. El auto ha contado con siete votos a favor y cuatro en contra, entre ellos el del Presidente, Francisco Pérez de los Cobos, que es catedrático de relaciones laborales y autor – como mínimo intelectual – de parte de la Reforma Laboral, que redactó con el carnet del PP en el bolsillo, contraviniendo la esencia de la Justicia que hasta ahora evitaba que los jueces fueran también parte.

3. Aznar impuso dos grandes ideas en el PP: hacerse con el mayor número de medios de comunicación y trufar todos los niveles de la judicatura con militantes – algunos sin carnet – de confianza. El resultado está en este auto: la Justicia deja de ser el último asidero contra los abusos. El primero ya nos lo quitaron con la ley de tasas judiciales. Entonces, sin justicia fiable... ¿Dónde nos colocan? ¿Delante de las vitrinas de los grandes almacenes con un mazo en la mano? Ni eso. La nueva ley de seguridad ciudadana nos trituraría.