Vistas de página en total

viernes, 5 de diciembre de 2014

Big Brother se pone las botas en Catalunya

Y, Colón, por supuesto, también era catalán
En mi ingenuidad creía que colectivos tan esperpénticos como s’Academi de la Llengo Baléà, eran un subproducto de un país al que históricamente le ha costado mantener su nivel de autoestima; pero he constatado que no es así. En Catalunya, uno de los espejos donde siempre se han mirado las Illes Balears, también van servidos: allí crece y se desarrolla el Institut Nova Història (INH) cuyo objetivo es demostrar que ilustres personajes y líderes históricos, desde Miguel de Cervantes hasta Hernán Cortes, eran catalanes y que solo el complot contra Catalunya desde Felipe II, ha ocultado la verdad.

En todas partes existen asociaciones frikis pero impacta que la INH se encuentre como pez en el agua en un país culto como Catalunya: aparecen en los medios públicos de comunicación, reciben subvenciones de la Generalitat y algunos de sus destacados miembros ocupan cargos importantes en la Assemblea Nacional Catalana.

Miguel de Cervantes era en realitat Miquel Sirvent, Américo Vespucio era Amèrico Despuig. Por supuesto, Leonardo Da Vinci también era catalán, como lo demuestran en su escudo de armas las tres barras de la casa real de Nàpoles (la casa reial catalana). Santa Teresa era la abadesa de un convento de Pedralbes. Big Brother de Orwell, el transformador de la historia, se pone las botas en el Principat.

Definitivamente, Catalunya ha vivido tiempos mejores que los actuales.


No hay comentarios:

Publicar un comentario

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.